La dinámica de lo inpensado

Esa es una de las tantas definiciones del Fútbol, y no precisamente por lo que pasó el domingo. Pero fue lo primero que recordé, lo inpensado, pero inpensado por prohibido, más que por imposible, porque no podía ser realidad. Todavía siento tristeza, aunque se parece más a vergüenza, a humillación que a otra cosa. Porque toda la vida nos van a cantar "vos sos de la B" y eso es lo peor que te puede pasar en algo tan grande como nuestro club. Sé que hay cosas peores, pero esto me desmoraliza completamente, porque Varsky, como siempre, no podía definirlo mejor: "El fútbol es la más importante de las cosas menos importantes de la vida". Y más que nada el dolor es muy grande porque siento que lo merecíamos. No importa que no nos cobraron un penal, o que no pudimos ganar después que Passarella se peleara con Grondona. No importa si estaba arreglado o no, pasó lo que tenía que pasar. Es humillante que Aguilar ande por la calle como si nada, mientras la barra ni se enterara que también fueron responsables en todo esto.
Mi sentimiento por el club sigue siendo innegociable y con más razón siento lo que pasa, y sé que vienen tiempos difíciles, que estamos a la deriva, y con más fuerza quiero atarme al mástil y soportar lo que venga, no sé porque, seguro es lo inexplicable de todo esto, de la pasión que cada uno tiene y lleva en lo suyo y a su manera.